Cómo cocer el pulpo

En este artículo vamos a enseñar cómo cocer el pulpo. El pulpo es uno de los animales que más temor puede provocar entre los que aprenden a cocinar. Cocinar el pulpo de una forma correcta ya que, para que este alimento esté verdaderamente bueno, debe cocerse muy bien. Como sabemos, el pulpo es un alimento que es difícil de tratar. Ya sea por el cuidado de la cocción, ya sea por cómo hay que tratarlo antes de cocerlo.

A continuación vamos a ver la mejor forma para cocer el pulpo. Cuando veas lo sencillo que resulta seguir los pasos y conseguir un pulpo perfecto empezarás a añadirlo a tus platos con regularidad.

Cómo cocer el pulpo

Pues bien, sin más esperas vamos a empezar a cocer el pulpo. Lo complicado de cocer el pulpo es llegar a entender el punto perfecto de cocción. Para los expertos, un pulpo está perfectamente cocido cuando su consistencia no es ni muy dura, ni muy blanda. Hay que encontrar el equilibrio justo.

Antes de cocer el pulpo

Lo primero que tenemos que hacer antes de cocer el pulpo es elegirlo. Os recomendamos que, ya sea congelado o fresco, compréis productos de alta calidad. De esta forma vuestro plato comenzará con una buena base y será el principio de un gran plato.

Las fibras

Por si no lo sabéis, antes de cocer el pulpo hay que vérselas con él. El pulpo tiene un montón de duras fibras que recorren su cuerpo y sus patas. Por este motivo, hay que romper esas fibras antes de cocer el pulpo porque, sino, será incomestible.

Algunas personas se prefieren pasar este paso o, simplemente, no disponen del tiempo necesario para hacerlo. Para estas personas recomendamos que se compre el pulpo congelado. De esta forma se podrán ahorrar tener que romper las fibras.

Si prefieres comprar el pulpo fresco y romper tú mismo las fibras, ahora explicamos las formas para hacerlo. La primera forma de hacerlo es la más sencilla. Se trata de coger el pulpo y ponerlo en el congelador alrededor de tres días. El hielo hará que las fibras se rompan por sí mismas. Después solo tendrás que descongelarlo y seguir los pasos. Pero ojo, antes de congelarlo tienes que limpiarlo a la perfección y quitarle todas las tripas, vaciarle bien los ojos y la cabeza, además de sacarle la boca.

Por otra parte, si no dispones de un congelador o prefieres hacerlo de la forma clásica, te enseñamos cómo. Para hacerlo se sigue la técnica que siempre se ha seguido en Galicia: coger el pulpo por las patas y golpearlo fuertemente repetidas veces sobre una pared o sobre piedras. De esta forma, las fibras se romperán y el pulpo estará listo para cocerse. Si no dispones del espacio suficiente para golpear el pulpo contra una superficie dura, siempre puedes colocar el pulpo sobre la encimera de mármol de la cocina y golpearlo con un rodillo hasta que se rompan todas las fibras.

Cocer el pulpo

Una vez hayamos escogido una de las formas de romper las fibras y lo hayamos hecho, ha llegado la hora de cocer el pulpo. Cabe decir que, para el caso de las personas que hayan congelado el pulpo en casa, hay que sacarlo un día antes para que se descongele bien. Podéis meterlo en una cazuela muy grande y dejarlo descongelar lentamente en el frigorífico.

Asustando al pulpo

Antes de ponernos a cocer el pulo, es mejor que lo pasemos un poco bajo un chorro de agua fría. Esto lo hacemos para poder eliminar las impurezas y suciedad que pudiera tener el pulpo. Cuando lo hayamos hecho, pondremos abundante agua en una olla grande y la ponemos al fuego alto. Una vez el agua de la olla esté en su punto de ebullición más alto, cogemos el pulpo y seguimos una técnica llama asustar al pulpo.

Esta es una técnica que se hace desde hace muchos años. Para hacerlo tenemos que coger al pulpo de la cabeza y meterlo de un golpe en la olla con el agua hirviendo. Lo sacamos rápidamente y volvemos a introducir el pulpo de golpe en la olla con el agua. Esto lo tenemos que hacer tres veces seguidas. Esta técnica se lleva a cabo para evitar que la piel de las patas del pulpo no se desprenda cuando lo estemos cocinando y quede más bonito. Además, haciendo esto también conseguimos que el pulpo se enderece y tenga mejor forma y se cocine mejor.

Cociendo el pulpo

Una vez hayamos asustado al pulpo podemos terminar de cocerlo. Para hacerlo solo tenemos que meter el pulpo en la misma olla con agua hirviendo donde lo hemos asustado. Ahora tenemos que dejar que se cueza. El tiempo de cocción suele depender del peso del pulpo. Para una pieza que pese alrededor de 2 kilos, el pulpo requiere una cocción entre los 25 y los 30 minutos. Por tanto si nuestro pulpo pesar alrededor de 3 kilos, deberemos cocerlo unos 40 minutos. Y si, sin embargo pesa 5 kilos, tendremos que cocer el pulpo una hora. Haced bien las proporciones para que la cocción sea perfecta.

Mientras avanza el tiempo del pulpo en el agua, conviene pincharlo de vez en cuando para saber cómo está de duro. Si cuando han pasado 30 minutos vemos que el pulpo está un poco duro todavía, lo dejaremos 5 minutos más sin tocarlo. Después de esos cinco minutos volvemos a pinchar para comprobar su consistencia. Si vemos que está listo, podemos retirarlo. Si creemos que aún está un poco duro, volvemos a repetir el proceso y lo dejamos 5 minutos más al fuego.

Una vez la consistencia sea perfecta, dejaremos el pulpo reposar dentro de la olla por algunos minutos. Después lo sacamos a una fuente. Y lo cortamos como mejor nos venga para nuestra receta. Para darle más sabor a la cocción del pulpo, podemos añadir alguna hierba aromática o una cebolla al agua donde lo cocemos. Comúnmente se suele echar un poco de pimentón de la vera y aceite de oliva y se sirve templado con un poco de sal por encima. Esta es una de las tantas recetas que podemos elaborar solo sabiendo cómo cocer el pulpo.

Para terminar el pulpo

Además, es típico hacer el pulpo con patatas cocidas. Por eso, os recomendamos que una vez que el pulpo esté cocido y lo saquemos del agua, no tiréis esa agua. Podemos echar unas cuantas patatas en el agua de cocción del pulpo y cocerlas ahí. Solo tendremos que añadir sal al agua y ya está. No recomendamos salar el agua con el pulpo porque el pulpo debe salarse fuera en el plato. Tened en cuenta que las patatas saldrá de color rosado y con un ligero sabor a pulpo. Ese el fin que se busca cociendo las patatas en el agua del pulpo, pero podría haber personas a las que no les gustase. Otra opción para el agua de la cocción del pulpo es utilizarla para hacer un poco de arroz o de pasta de acompañamiento.

Como consejos podemos decir que, sobretodo si el la primera vez que os ponéis a cocer el pulpo, escojáis uno que pese alrededor de 2 kilos. Aunque os parezca un poco pequeño, es el tamaño ideal para empezar a aprender a cocinarlo.

Esperamos que este artículo os haya gustado y que hayáis aprendido cómo cocer el pulpo de la forma correcta.

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