Cómo hacer cheesecake sin horno

Vamos a hacer una de las tartas más típicas: una cheesecake de fresas. Para elaborarla no es necesario la utilización del horno y tampoco implica un cocinado elaborado. A continuación les explicamos como prepararla:

INGREDIENTES DE LA CHEESECAKE

PORCIONES: 12 aprox.

DIFICULTAD: BAJA

TIEMPO: 35 minutos

PARA LA BASE:

  • 250 gramos de galletas María
  • 130 gramos de mantequilla sin sal
  • 30 gramos de azúcar (dos cucharadas aprox.)

PARA EL RELLENO

  • 2 paquetes de queso cremoso (por ejemplo Philadelphia) a temperatura ambiente
  • 1 + 1/4 tazas de leche condensada (31,2 centilitros)
  • 1/2 taza de azúcar
  • 1/4 de taza de jugo de limón (0,0625 centilitros)
  • 1 cucharadita de extracto de vainilla
  • 2 hojas de gelatina neutra
  • Mermelada de fresa
  • Fresas naturales

PREPARACIÓN

Instrucciones para hacer cheesecake sin horno

PARA LA BASE DE LA TARTA:

  1. Se engrasa todo el molde con mantequilla, fijándonos bien en que untamos todas las partes, incluídas las paredes.
  2. Se trituran las galletas María hasta que queden como polvo. Para hacer esto podemos hacerlo de la forma tradicional, poniendo las galletas en un recipiente y machacándolas con un mortero o, si disponemos de ello, podemos utilizar un accesorio especial de la batidora que tritura. Obviamente, se recomienda utilizar la trituradora, ya que nos supone menos esfuerzo y la textura de las galletas será mejor. Cómo hacer cheesecake sin horno
  3. Mientras, ponemos la mantequilla a derretir. Podemos hacerlo en el microondas o en una olla. Cuando la mantequilla está completamente disuelta, juntamos en un bol a parte el polvo de las galletas María y la mantequilla derretida. Se agregan también los 30 gramos de azúcar (dos cucharadas) y se revuelve todo hasta que quede una masa compacta.
  4. Una vez tenemos la mezcla, la ponemos en el molde previamente untado de mantequilla. Presionamos poco a poco la masa hasta que quede uniforme. Tenemos que cubrir toda la base. Cuando ya esté cubierta y veamos que está bien distribuida, metemos el molde en el frigorífico mientras seguimos con la receta.

PARA EL RELLENO:

  1. Ponemos todo el queso cremoso en un bol y lo batimos. Añadimos el azúcar y mezclamos bien hasta que quede suave y con una consistencia cremosa.
  2. Ahora, vamos añadiendo poco a poco y sin dejar de batir la leche condensada. Añadimos el zumo de limón y el extracto de vainilla y seguimos removiendo.
  3. En este punto, podemos coger una batidora y seguir mezclando la masa a velocidad alta para asegurarnos de que quede totalmente integrada.
  4. A parte, ponemos las dos hojas de gelatina en un bol con agua fría o leche fría hasta que queden blandas. Después añadimos con cuidado la gelatina a la masa y removemos hasta que se deshaga y quede bien distribuida.
  5. A continuación, sacamos de la nevera el molde con la base y podemos observar que ésta está firme y durita. En el caso de que la base siguiera blanda, sería conveniente meterla en el congelador durante 5 o 10 minutos. Cuando esté lista, vertemos poco a poco la masa en su totalidad.
  6. Metemos de nuevo el molde con cuidado en el frigorífico y dejamos enfriar durante 4 horas.
  7. Cuando haya pasado este tiempo, sacamos la tarta de la nevera y podremos ver como la masa ha cuajado y está consistente. Si éste no fuera tu caso y la masa aún siguiera líquida, vuelve a meterla en el frigorífico hasta que esté compacta. Cuando la tengas así, es hora de echarle una capa (al gusto) de mermelada de fresa por la superficie. Y, para decorarla, corta algunas fresas y colócalas de la forma que más te guste.Cómo hacer cheesecake sin horno
  8. Vuelve a meter la tarta en la nevera y déjala enfriar durante toda la noche.

Y ya tenemos nuestra tarta de cheesecake lista para comer. Como podéis ver, es una receta sencilla y fácil de hacer, y lo más importante: que está muy rica. A los que les guste el queso van a disfrutar con esta tarta de textura cremosa y sabor suave, perfecta para acabar una comida de celebración, para un cumpleaños o simplemente por placer.

A continuación les dejamos unos consejos por si existen algunas dudas:

Consejos para hacer cheesecake sin horno

  • Es conveniente que el molde sea desmontable, así podremos sacar con mayor facilidad la tarta.
  • A la hora de hacer la mezcla para la base, es muy importante que quede todo bien mezclado e igualado, ya que podrían quedar pegotes de mantequilla en algunas parte y polvo de galletas solo en otras, y esto se nota después.
  • Es muy importante deshacer bien la gelatina en el agua. Si esto no se lleva a cabo de la forma correcta, quedarán grumos en el relleno y echará a perder nuestra tarta, ya que es una sensación muy desagradable cuando estamos comiéndola.
  • Es primordial que la base de galletas de la tarta esté compacta. Si no se ha dejado enfriar el suficiente tiempo y hay partes que están blandas, al echar el relleno se mezclará todo y no nos quedará la forma deseada.
  • Cuando cojamos las fresas, es necesario lavarlas muy bien y cortar las hojitas.
  • A la hora de decorar la tarta, el relleno tiene que estar cuajado. Si esto no es así, cuando echemos la mermelada no tendremos una base sólida para hacerlo y es posible que se mezcle; y a la hora de poner las fresas, si el relleno sigue blando, es muy probable que se hundan.
  • Sírvase muy frío.

Cómo hacer cheesecake sin horno

¡Buen provecho!

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